×

Alfonso Ortega: La Marca del Negocio, un Valor de Expresión para la Expansión Comercial con Protección Legal

La marca de un negocio representa mucho más que un simple nombre o logotipo: es una herramienta fundamental para diferenciarse en el mercado, construir lealtad y proteger legalmente la identidad de un producto o servicio. Alfonso Ortega, experto en propiedad intelectual y registro de marcas, señala la importancia de asegurar una protección adecuada para la marca, lo que añade valor y facilita la expansión del negocio.

¿Qué es una marca?

Una marca es un signo perceptible que distingue productos y servicios en el mercado. Puede incluir palabras, figuras, formas tridimensionales, sonidos o combinaciones de estos elementos, permitiendo a los consumidores identificar y elegir entre distintas opciones. La creación de una marca fuerte y bien definida ayuda a captar la atención en un entorno competitivo, generando una identidad clara y memorable.

¿Por qué crear una marca distintiva?

• Identidad: Diferencia tus productos y servicios.
• Confianza: Genera lealtad y reconocimiento en los consumidores.
• Estrategias de Marketing: Facilita campañas efectivas y de alto impacto.
• Protección Legal: Ofrece respaldo jurídico ante imitaciones y usos indebidos.
• Valor Comercial: Aumenta el valor de tu negocio a través de una imagen sólida.

La importancia de registrar tu marca

Registrar una marca es un paso clave para protegerla y fortalecer su presencia en el mercado. Alfonso Ortega recomienda realizar este proceso con un enfoque estratégico para asegurar beneficios como:

1. Protección exclusiva: Evita que terceros usen la marca sin autorización.
2. Reconocimiento: Establece una identidad clara y diferenciada.
3. Expansión: Facilita la posibilidad de franquiciar o licenciar la marca.
4. Seguridad jurídica: Protege la inversión y la imagen de la marca.
5. Valor a largo plazo: Una marca registrada y bien posicionada puede generar importantes ingresos.

¿Cómo registrar una marca ante el IMPI?

El registro de una marca en México se realiza ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y requiere de un proceso específico. Ortega aconseja cumplir con los siguientes pasos:

1. Identificación de Clase: Define los productos o servicios bajo la clasificación internacional (Clasificación de Niza).
2. Elementos no Registrables: Identifica los elementos que no pueden ser registrados.
3. Diseño de Marca: Adjunta un ejemplar del diseño de tu marca.
4. Documentación: Presenta documentos del titular y, si aplica, del representante legal, y paga los derechos oficiales.
5. Reconocimiento de Prioridad: Si existe registro previo en otro país, incluye esta información.

Este proceso puede realizarse en línea, presencialmente o a través de mensajería especializada, y suele incluir un monitoreo en línea del estado de la solicitud. Con una aprobación favorable, la marca se protege por 10 años, con posibilidad de renovación. Alfonso Ortega destaca que la renovación debe presentarse seis meses antes del vencimiento para evitar la pérdida de los derechos.

Conclusión

Una marca sólida y bien protegida es un activo que añade valor y ofrece múltiples beneficios comerciales. Para garantizar un registro efectivo y la protección adecuada, Alfonso Ortega sugiere contar con asesoría profesional para navegar el proceso de manera óptima y adaptada a las necesidades de cada negocio.